Otro dato curioso y a la vez aterrador es el de la gran fuerza que poseen en sus patas. Sus patas son tan poderosas como para aplastar el cráneo de una vaca y deshacerlo con facilidad de un zarpazo o bien como para destruir la espalda de un oso perezoso en un parpadeo.
Os recomiendo que si alguna vez, teneis que hablar con alguno... sea a cierta distancia, jejeje.
Chula la foto eh???
muy chulo si chlulisima
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